Las organizaciones cada vez con mayor fuerza deben arriesgarse e ir más allá de lo establecido, escudriñar y explorar son aspectos que harán la diferencia y permitirán sobresalir en todos los sentidos. El E-commerce es un canal de comercio que hace poco se está implementando en Colombia, el cual ha sido adoptado por almacenes de cadena como Éxito y Fallabella y que gracias a esto se ha empezado a propagar la idea de acogerlo por parte de otras compañías. La idea consiste en portales virtuales donde se permite la realización de compras, en donde el consumidor como hacer un pedido a domicilio solo tiene que escoger con un clic que productos quiere que le lleguen a su domicilio; para esto se tuvo que invertir millonarias sumas de dinero con el único objetivo de aumentar porción de mercado, facilitar la gestión de distribución y fidelizar clientes.
Esta es la primera vez que dos multinacionales se abren paso con la implementación de una estrategia tecnológica tan costosa en el país, y a pesar que el comercio electrónico se ha visto desde la década de los noventas es hasta hoy que cogen fuerza.
El riesgo es una constante en la implementación de estas innovadoras estrategias pues dependerá de una buena distribución y delegación de tareas que cuente con el factor éxito, es por esto que se menciona que se podría llegar a morir en el intento y para esto es necesario contar con la suficiente claridad en cuanto a los objetivos, poseer conocimiento técnico de los productos o servicios que se van a ofrecer, estipular la cantidad de clientes estimados, acordar las transacciones deseadas y delegar en el personal idóneo.
La tecnología es una herramienta que de quien la utilice y como la utilice dependerá si es un facilitador y mejorador de procesos o si por lo contrario es un obstructor y congestionador de procesos, es por esto que considero que este tipo de decisiones se deben tomar con calma y con toda la objetividad posible para que contribuya significativamente a la organización.